Consejos de limpieza industrial

Desde hace unas décadas la importancia de hacer una buena limpieza y desengrase ha ido cobrando fuerza. Las piezas tienen que estar completamente limpias tanto para su montaje como para aplicarle cualquier tipo de acabado. 

Por ello, la eliminación de residuos acumulados en la piezas durante los procesos de fabricación (óxidos, aceites, polvo…) es fundamental para garantizar un buen proceso y asegurar que las piezas terminadas estén en perfectas condiciones y listas para enviar a sus clientes.  

Teniendo en cuenta todo esto, ¿en qué nos tenemos que fijar a la hora de limpiar una pieza?

1 – Conocer sus características. Es decir, el material, tamaño y morfología (si es una pieza sencilla o tiene elementos complejos como agujeros pasantes, ciegos, roscados, etc.)

2 – La fase del proceso de fabricación en el que se encuentra la pieza (intermedio o acabado), así como el tratamiento que le aplicaremos en su fase posterior (galvanizad, pintado, tratamiento térmico, etc.)

¿Cómo haremos la limpieza de las piezas mecanizadas?

Haremos la limpieza con refrigerante soluble en agua y potentes disolventes utilizando una lavadora de piezas de vacío. 

¿Qué son las lavadoras de piezas de vacío?
Los constantes avances han hecho que este tipo de máquinas hayan pasado de ser un complemento accesorio, casi manual y de alto coste económico, a convertirse en auténticas células automáticas de producción indispensables hoy en día, para obtener el volumen y la calidad de fabricación deseada.

Una vez hecho el análisis que hemos comentado anteriormente, valoraremos el tipo de lavadora más adecuada para la limpieza de nuestras piezas. Para ello, también tendremos que reparar en otros factores relevantes como:

1. El producto de limpieza que usaremos.
2. El volumen.
3. Las características de las cestas.
4. La temperatura
5. Los ciclos de trabajo necesarios (prelavado, lavado, enjuague, secado…).
6. Los procesos de limpieza (por inmersión, pulverización, agitación, basculación, rotación total, etc.).
7. También tendremos en cuenta el sistema de carga.